Ongarato pide licencia y el municipio queda al rojo vivo

El intendente de Esquel y Pre candidato a Senador Nacional por el radicalismo, Sergio Ongarato, confirmó que en los próximos días va pedir licencia para abocarse de lleno a la campaña. Probablemente sea esta semana cuando regrese a la ciudad.

Quedará entonces en el cargo el Arquitecto Alejandro Wengier, que es el concejal más votado de Esquel, hoy Presidente del Concejo Deliberante.

Y aquí comienza otra historia, sin antecedentes. Ongarato enfrentará en la interna a Matías Taccetta también propuesto precandidato a senador nacional por el PRO, acompañando la figura de Ignacio Torres. El Intendente y el secretario más fuerte de la gestión enfrentados en una elección.

Si bien aún todo transcurre en el terreno de la campaña, está claro que nada será igual en el municipio a partir de esta postulación y que buena parte de las cartas quedaron echadas en el momento mismo que el Intendente aceptó liderar la lista de senadores.

De hecho los reproches ya comenzaron: "El diputado nacional Nacho Torres ha ofrecido cargos de diputados para su fórmula a radicales como a mí y a otros secretarios. Una situación un tanto incómoda que haya elegido al secretario de hacienda de mi administración que deberá tomarse licencia como yo" señaló Ongarato, este sábado por la noche al momento de cierre de listas.

La respuesta no tardó en llegar: "Sergio no hay que enojarse porque haya nuevas caras y se fomente la participación en Juntos por el Cambio. De eso se trata la democracia" le respondió Torres inmediatamente

El tiempo que le queda a Matías Taccetta en el municipio parece ser breve. El Secretario con más poder dentro de la estructura, y en muchos momentos el que parecía tomar todas las definiciones, no está cómodo en el lugar que hoy le queda.

Él mismo anticipó que prefiere no trabajar en una gestión liderada por Wengier en caso que este termine al frente del municipio para completar la administración en curso. "No es personal, es político" afirmó en contacto con esta periodista.

Si Ongarato gana la elección y se va al Senado, Wengier asume la Intendencia y elige su forma de gobernar y con quién. Sobre todo esto: con quién. No está Taccetta en el análisis de Wengier, ni Wengier en el análisis de Taccetta.

Pensemos otra alternativa, que Ignacio Torres le gane a Ongarato la interna y lo deje fuera de circulación para la Cámara Alta. Otra vez se mueven las piezas locales. Ongarato vuelve al Municipio pero Taccetta debe incorporarse en reemplazo de Torres como Diputado Nacional. Adelantó que en tal caso asumirá el compromiso que contrajo en la campaña y jurará como legislador nacional.

Mientras tanto en el Gabinete local, muchos ensayan explicaciones elegantes para un escenario que no estaba en los cálculos y que a varios le genera más incertidumbres que certezas.

Las definiciones de los políticos en gestión de Gobierno no son iguales a ninguna otra. Definitivamente el primer compromiso debiera ser gobernar y cumplir con la gestión comprometida, una vez alterado eso el desbarajuste viene solo.

El Municipio de Esquel muestra una imagen de números ordenados, de algunas obras en marcha, una gestión en provincia y nación que se profundizó este último tiempo. Para muchos es poco, para otros es mucho. Esto fue tomado como el valor central que posiciona a los funcionarios locales para nuevos cargos.

La pregunta es ¿Quién es el padre de la criatura? ¿Ongarato sólo? ¿Taccetta sólo?, ¿la dupla? Hoy, en definitiva, una dupla fuera de gestión.

Mientras tanto, todas las miradas apuntan a Alejandro Wengier. No es una figura gritona. Lejos de eso, tiene un perfil conciliador y ejecutivo que supo desarrollar también en la gestión al frente de la Secretaria de Obras Públicas.

En sus planes estaba llegar al despacho central de la calle Mitre.

Este es un primer ensayo, un par de meses ¿ Y después? Después, la vida continúa.