En la primera jornada de testigos en el juicio oral y público que se lleva adelante en Rawson en contra de Alberto Vargas por presuntas irregularidades en el Instituto de Asistencia Social de la provincia, declaró ante el tribunal de enjuiciamiento Carlos Barbato. El actual titular del IAS es el denunciante en la causa.

Barbato dijo que a poco de asumir el 15 de diciembre del año 2015 -reemplazaba a Vargas ante el cambio de Gobierno en la Provincia- recibió un informe del Tribunal de Cuentas de la Provincia que indicaba que ese organismo autárquico se encontraba en una profunda crisis económica, con 42 millones de pérdidas en cesación de pagos y sin medidas concretas para hacer ingresar dinero a sus arcas que le permitieron un normal funcionamiento.

El mismo informe del Tribunal de Cuentas destacaba asimismo que llamaba la atención la importante cantidad de contrataciones directas por fuera de lo que indican las reglamentaciones internas. "Comencé a revisar expediente por expediente a cada una de esas contrataciones y tal cual era mi obligación, realicé la denuncia inmediata ante la Fiscalía de Estado y luego ante el la Justicia Penal", dijo Barbato.

Agregó que al analizar esas contrataciones "me llamó la atención que en general se había contratado a empresas monotributistas que se habían creado muy recientemente. Una de ellas por ejemplo había emitido sólo 17 facturas y todas a nombre del Instituto. Los nombres que recuerdo eran por ejemplo Hacker, Tomada, Negro el 11, Ada Deportes. También nos llamó la atención los rubros de los servicios con las que se las había habilitado. Por ejemplo una misma empresa que ofrecía servicios de catering, también vendía sillas de plástico y herramientas. Por ejemplo a la empresa Calypso que siempre vendió alfombras, el Instituto le compró trofeos. Hacía seis meses que Lotería no le pagaba a nadie porque estaba en cesación de pagos. Sin embargo estas contrataciones sí se pagaban", indicó Barbato.

El Tribunal de enjuiciamiento está integrado por los jueces José García, Ivana González y Mirta Moreno. Vargas es defendido por el abogado penalista Fabián Gabalachis.

En representación de la Fiscalía de Estado en carácter de querellante se encuentra el abogado Martín Castro y por el Ministerio Público Fiscal, el fiscal general Osvaldo Heiber.