Por Donato del Blanco

La pandemia llegó para obligarnos a repensar todas las situaciones.

Y en materia de educación se generó una nueva modalidad online, tanto para el estudiante que recién empieza la carrera, aquellos que inician las prácticas profesionales y otros que se reciben a través de una videollamada.

La incertidumbre que tienen los estudiantes son muchas, desde el alquiler que dejaron en otra provincia hasta las modificaciones que implica suspender la vida de cursada. No hay más juntadas, mates con amigos entre apuntes, las preguntas a los profesores, y las clases presenciales. Todo eso desapareció hace siete meses.

Las vivencias son definitivamente atípicas, por eso desde EQSnotas.com hablamos con distintos estudiantes universitarios para que nos cuenten sus vivencias en este particular proceso.

Los recibidos en pandemia

Años pensando en el típico festejo universitario, para que llegue la pandemia y cambie los planes.

Nadia Lucero se graduó hace muy poco tiempo como Licenciada en Nutrición en la Universidad Nacional de Córdoba. La experiencia merece ser contada: se recibió a través de una videollamada.

Este contexto le cambió todos sus planes, desde la fecha hasta el lugar para recibirse. Viajó hacia su ciudad natal, Esquel, pero el abrazo no fue rápido porque debía pasar la cuarentena.

¨Fue muy tranquilo. Yo estaba cumpliendo la cuarentena obligatoria, por lo tanto estuve sola y bastante triste. A pesar de que todos se hicieron sentir cerca, por llamadas o mensajes, no es lo mismo que tenerlos al lado mío ̈.

¿Recibirse en casa? Era algo que no imaginaba nunca. Sus sentimientos se pueden ver en cada palabra "Estoy aprendiendo todavía. Psicológicamente para mí fue muy terrible, pero también supe comprender la situación y que la salud de todos es más importante que cualquier otra cosa, fue una cuestión de responsabilidad social.

 "Me recibí,  cerré la pestaña de zoom y me quedé solo en el departamento procesando"

Los “universitarios virtuales”, una realidad que nadie imaginaba

Andino Schmidt, se recibió en Julio como Diseñador Gráfico en la Universidad Siglo XXI y también compartió su experiencia como "graduado virtual".

¨Uno se imagina que en la recibida iba a haber un montón de gente tirándote cosas y festejando. Cuando me recibí cerré la pestaña de zoom y me quedé solo en el departamento procesando lo que había pasado. Obvio que los cariños llegan por llamada o mensaje pero es extraño que algo que pensaste toda tu vida que iba a ser de una manera termina siendo totalmente distinto. De todas formas no fue una mala experiencia, todo lo contrario¨.

Su festejo iba a ser en el campus de la universidad, con amigos y familiare. Pero la nueva disposición lo obligó a vivirlo en soledad  "Como vivo solo, cuando terminó la exposición me quedé sentado en el living. Después a la noche me vi con unos amigos, pero el momento de recibirme fue solo".

¿Todo fue malo?, no. Andino notó las ventajas que tuvo a la hora de exponer de manera virtual, en relación con los nervios  y la ansiedad por rendir: "Siempre estuve nervioso por exponer la tesis presencial frente a un evaluador, al ser online es diferente porque estás en el living de tu casa rindiendo un oral. Hay nervios igual pero se manejan mejor creo yo¨.

Con la pregunta inminente de que le provocó recibirse en su propia casa y sus sensaciones, reflexiona: ̈ Terminé de rendir, muy contento y alegrado por como me había ido, sentado en la silla de la computadora con la pregunta¿y ahora qué?. Fue extraño terminar una etapa muy importante en mi vida y estar solo en mi departamento. De todas maneras la alegría está siempre, muy contento por lo que viví¨

¿Y ahora qué? también es la pregunta que se realizan todos los estudiantes universitarios sobre el futuro que nos depara y las incertidumbres: ¿Seremos la nueva generación de "graduados online¨? Lo vamos a saber más adelante, con las nuevas medidas que se dispongan y con la esperanza de encontrar una vacuna para que vuelvan los festejos tradicionales y el contacto presencial.

Sin prácticas no es lo mismo

Los “universitarios virtuales”, una realidad que nadie imaginaba

Franco L.K es estudiante de Medicina y nota ciertas ventajas y desventajas a la hora de cursar online: ¨Se habilitaron aulas virtuales en todas las materias. Creo que tiene sus ventajas como menor tiempo de viaje o poder acomodar horarios con clases grabadas, pero también desventajas como el acceso a internet con conexión estable, muchas actividades o trabajos prácticos o material de lectura que aumenta la carga horaria.Pero en general tuve buena experiencia con la modalidad. No tuve inconvenientes grandes, sólo falta de internet algunos días¨.

Algunas carreras poseen prácticas que deben ser realizadas para poder profesionalizarse, en especial las relacionadas con la salud. Franco está preocupado por esto  "mi carrera tiene prácticas. Al no hacerlas, estoy perdiendo la experiencia en el contacto con pacientes, muy importante en las Ciencias. de la Salud. Además, la mayoría no van a poder ser recuperadas.

Los que están en el último año

Los “universitarios virtuales”, una realidad que nadie imaginaba

Camila Pelaez Da Dalt se encuentra en el último año de odontología en la Universidad de Mendoza. Desde que se decretó la cuarentena tuvo en principio frustración e incertidumbre ya que era su último año, con todas las expectativas que esto significa.

"La cuarentena comenzó apenas teníamos que arrancar la facultad, era mi último año, tenía muchísimas expectativas, pensamos que era sólo 15 días y se terminaba todo, pero realmente en mi facultad tuvimos clases virtuales desde el primer momento. Costó para todos, tanto profesores como para alumnos,  pero a medida que pasaron los días se fueron solucionando los problemas"

Con la frustración de no poder hacer materias importantes de forma presencial, reflexiona sobre la cursada online:  "Tuve materias que eran las más importantes de toda la carrera que nunca nos dieron un teórico. Es fundamental porque  muchos tratamientos de pacientes dependen de los criterios de los profesores. Es sumamente importante escuchar sus apreciaciones¨

Uno se pregunta... ¿Cómo harán los profesores para dar el contenido de las materias en esta nueva modalidad?, en el caso de Cami : "nos subían unos PDF que  tenía  un título... CONSULTAR CON BIBLIOGRAFÍA de la que no disponíamos. Después sentimos que nos tomaban el pelo, nos subían como actividad de la semana hacer crucigramas, ¡si crucigramas! ¨ expresó Camila con un notable enojo. Luego de algunos reclamos el tema fue mejorando pero el proceso no resulta fácil.

Camila tuvo COVID a fines de Julio y tuvo que rendir un parcial. La mecánica imponía que  para rendir necesitaban dos dispositivos conectados a la videollamada: Un celular y una computadora enfocándolos mientras hacían el parcial por la plataforma virtual: "En esas dos semanas de aislamiento se me había roto el cargador y mi celular llegaba a cargar hasta el 24% y se apagaba, por lo que era imposible tener una videollamada encendida para rendir el examen¨ comentó a las autoridades su situación y debió rendir  pero de otra manera.

Lo que espera Camila es que todo pase pronto, y pueda volver a su lugar, Esquel

Nuevas Interacciones

Los “universitarios virtuales”, una realidad que nadie imaginaba

Gonzalo Veuthey es estudiante de Ingeniería de la UTN. Por suerte , su universidad ya tenía una plataforma virtual que usaban algunos profesores, pero la obligatoriedad hizo que todos deban adaptarse:

"Ya existía una plataforma de la universidad virtual, en la UTN, en la cual no la usaban todos los profesores, solo unos pocos. Este año se vieron obligados a introducirse en ese medio para ir aprendiendo el tema de cargar material, algunos dan clases por Zoom, otros cargaron videos, otros filminas, entre otras.  A su vez realizaban exámenes multiple choice".

Una situación que lo alivió es el no tener que viajar hasta la universidad y volver, que era algo que le llevaba mucho tiempo: "Respecto a los tiempos, da cierta comodidad por el hecho de que estoy desde mi casa y no me tengo que mover, hay gente que tiene mucho de tiempo de viaje desde su casa hasta la universidad, ahora haces un click y tenes la clase en donde estés".

Otro problema que ocasiona el cursar virtual, es no poder utilizar los recursos que brinda la universidad, ya que hay muchos estudiantes que no pueden descargar programas o no tienen un equipo tecnológico para poder llevar a cabo las prácticas en las que presencialmente sí podían: ¨Algunos no tienen un ambiente tranquilo para estudiar, otros no poseen computadoras que puedan cumplir con las exigencias según la carrera que cursen (en mi caso utilizo programas de edición, software, que requieren recursos) o algunos tienen que compartir computadora. En mi caso estoy bien, pero cuesta el hecho de estar todo el tiempo encerrado, se vuelve monótono, querés  salir. Tiene sus pro y sus contras".

Gonzalo habla de un "autoaprendizaje":  "Se entrenó mucho más eso. Por el lado del profesor es dar una clase desde su casa que tampoco es fácil, pero para el alumno es más difícil, sobre todo las materias en las que dan solo material y no dan clases, cuesta el tema de mantener la concentración y estar siempre en casa.

Para sobrellevar la situación realiza una reflexión para que la puedan tomar todos los estudiantes: ¨es fuerza de voluntad y tener el objetivo claro a lo que apunta ser. Siempre hay algún que otro palo en la rueda que si uno lo usa como excusa nunca sale de la zona de confort. Poniéndole garra, ganas y teniendo el objetivo claro se puede tarde o temprano¨.

Esperando a que habiliten las prácticas

Los “universitarios virtuales”, una realidad que nadie imaginaba

Hablamos con Agustina Clavijo Pozzoni, quien finalizó sus estudios de Medicina en Buenos Aires en diciembre del 2019. Este año debía iniciar sus prácticas finales obligatorias para poder obtener su título:

"No pude iniciar mis prácticas finales, es algo que nos afecta a muchos estudiantes, sobre todo los que estamos en el último año"

La preocupación de Agustina es que al no poder comenzar sus prácticas, no puede ejercer su profesión  "Sin esto no podemos obtener nuestro título ni ejercer legalmente, estamos en una situación crítica de salud a nivel mundial" .

Hay actividades y carreras que han dado respuesta acerca de las nuevas disposiciones, pero no es así en el caso de Agustina: ¨Desde el mes de marzo no recibimos respuesta sobre qué va a pasar con nuestras prácticas, que sin duda son fundamentales para la finalización de nuestra carrera como profesionales de salud. Es cuando uno más genera herramientas para poder desenvolverse el día de mañana con total naturalidad frente a las personas que vamos a tener enfrente".   Indignación, y  frustración por no recibir ninguna respuesta de su facultad.

Además Agustina marca su voluntad terminar también para sumarse a los equipos médicos que están sobredemandados en esta contingencia sanitaria:   "Debido a la situación y la emergencia sanitaria, además del colapso tanto de camas como de personal de salud, es necesario que se busque una alternativa para  nosotros. Queremos colaborar con todo el plantel de médicos¨.

Pero también hubo momentos esperanzadores, fue para ella una gran  alegría  poder concurrir  y colaborar en el Hospital Zonal de Esquel: ¨me dieron un gran lugar para que pueda continuar con mi formación profesional, ad honorem porque no cuento con mi matrícula, por ende no pertenezco a los médicos de planta del hospital ni tampoco auxiliar. Pero me sirvió muchísimo para seguir aprendiendo".

Con orgullo, cuenta que desde su experiencia y lo que presenció en el hospital, el profesionalismo del equipo y de la infraestructura es excelente: ¨El hospital está muy preparado para afrontar todo lo que está pasando. Los profesionales que se encuentran dentro saben muchísimo, son 100% médicos de vocación. Fui 3 meses al hospital, varias horas, hacíamos guardias. Es algo que amo ya que amo la medicina, lo que  me molestó fue la falta de palabra de mi facultad ya que teníamos todos los papeles aprobados. El hospital al día de hoy me abre las puertas para que pueda seguir yendo y es algo que agradezco¨

En un principio la facultad le respondió que iba a convalidar las prácticas que realice en el HZE, pero después de tres meses le dijeron que no. Pese a eso, Agustina está muy feliz por la experiencia, lo que marca que vocación no le falta.

Opiniones encontradas

Un factor común en los estudiantes con respecto a esta nueva modalidad fue el ahorro de tiempo, el hecho de tener que viajar hasta la facultad y volver a algunos les llevaba mucho tiempo. Hoy en día con un click ya están en su clase desde la comodidad de su casa.

Entre las desventajas fueron la conectividad de WI FI para los que volvieron a Esquel. La realidad es que no funciona bien, por lo que les dificulta conectarse en la clase o rendir algún parcial o final.

En lo que coinciden es en la necesidad de que todo esto termine cuanto antes para volver a la vida normal, con clases presenciales.

Eso sí, la virtualidad ya llegó. Los profesores tuvieron que adaptarse y es casi seguro que en el futuro se adopten algunas modalidades que probaron este año, solo habrá que esperar.