La vuelta de la polera a nuestro guardarropa

Hace bastante les hablo de las prendas que vuelven, que la moda se reinventa y va al pasado para volver igual pero diferente.

Ya sabemos que los 90 volvieron en las zapatillas, los jeans, las camperas, y una prenda que se apoderó del invierno de una manera casi desapercibida fue la polera. Volvieron en todas sus formas y telas, y en el sur estamos agradecidas.

La verdad que yo en estos últimos años no tuve ninguna, o quizás una térmica para llevar al cerro y nada más. Pero este invierno me compré dos sweaters que no paro de usar.

En general la polera es una prenda que solo la usaban aquellas mujeres que la amaban y se sentían muy cómodas con ella, no era una prenda que resultaba indiferente, la amabas o la odiabas.

Si tenías el cuello corto no la usabas, si la cara era redonda tampoco, si eras muy calurosa menos. En general se usaba poco y la usaban solo las fanáticas.

Este año volvió con todo y en todas sus versiones para que todas podamos aprovecharla. Yo por ejemplo, que tengo cuello corto y cara redonda la elijo volcada y floja, que no me apriete y sentirme asfixiada.

Si tenes el cuello largo podes aprovecharlas bien ajustaditas y si tu cara es más alargada también.

Pero acá te dejo las tres maneras que más me gustan a mi.

La forma más IN de este invierno es usarla con un pantalón tiro alto, recto, mum o boyfriend, y un sweater polera metida completamente dentro del pantalón o al menos en la parte delantera, genera un efecto estilizador de la figura y queda muy canchera.

Si la polera es de algodón o finita otra opción súper canchera es llevarla debajo de una camisa o un vestido, como abrigo adicional.

Y si sos fan de los chupines es la mejor oportunidad para usarla con una polera bien gordita oversized.

Vos tenes una polera este invierno? Podes aprovechar y comprarla en sale, porque el próximo invierno también la vas a usar.

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