Una enfermera del sector maternidad del Hospital Zonal de Esquel vivió una violenta situación esta madrugada, alrededor de las 4.20 cuando una mujer ingresó al consultorio con su hija mayor de edad a punto de dar a luz. El episodio terminó con agresiones a la operadora de salud y una denuncia penal.

La madre se mostraba muy alterada y según fue consignado en la denuncia "de manera prepotente" comienza a decirle "...vos me cerraste la puerta en la cara...", aunque en realidad la enfermera no se había dado cuenta que estaba detrás de ella.

Lo cierto es que la víctima cierra la puerta y la mujer comienza a insultarla diciéndole "...ya me tenés cansada..." ante lo cual se produce un intercambio verbal. Con preocupación la denunciante llama al médico de guardia y en ese momento la agresora le dice que le iba a pegar, y comienza a tirarle manotazos por lo que se inicia un forcejeo. Según lo indicado, se apagó la luz, y la denunciante siente un golpe, no sabe con qué, en el ojo derecho y en la nariz.

A continuación abre la puerta, llama a las enfermeras y busca al guardia de seguridad que estaba a pocos metros quien se acerca inmediatamente ante la cual la agresora explicó que estaba en ese estado porque "habían maltratado a la hija todo el día."

Luego la enfermera llama con su teléfono particular al médico de guardia, quien llega y le explica a la agresora que no iba a permitir lo sucedido y que iba a hacer la correspondiente denuncia. Mientras tanto la joven mujer que había llegado para dar a luz fue atendida en su parto.