Ricardo Rolón, Martín O' Connor y Nelly García decidieron absolver a Luciana Rocío Rogel y a Oscar Leopoldo Rogel de los delitos de homicidio simple, en calidad de partícipes secundarios y de encubrimiento de Germán Acosta.

Los jueces entendieron que no hay elementos para sostener con el grado de certeza suficiente, que Germán Acosta fue asesinado y por lo tanto, tampoco para establecer algún tipo de participación o encubrimiento por parte de Oscar y Luciana Rogel, más allá de "que las conductas desplegadas por los acusados son objetivamente sospechosas". Imputados y víctimas participaron de la lectura por videoconferencia desde Trelew.

Ambos imputados fueron declarados coautores penalmente responsables del delito de hurto calamitoso por la apropiación ilegítima del Chevrolet Corsa y de una campera color verde, un par de zapatillas y una gorra, ocurridas en José de San Martín y en Los Altares entre el 1 y el 3 de mayo de 2011, en perjuicio de Acosta. Oscar Rogel también fue encontrado culpable del delito de hurto calamitoso y venta de cosa ajena, por la apropiación y venta de una moto propiedad del desaparecido.

Germán Acosta es un joven de Trelew que en mayo de 2011 viajó por unos días a José de San Martín y nunca más regresó. La causa se abrió en Trelew pero desde 2013 está en la Fiscalía de Esquel. El joven Germán Jaime Acosta fue visto por última vez el 30 de abril de 2011 en un bingo familiar organizado por el club Huracán de José de San Martín. Según relató un testigo -el juez de Paz del pueblo, Alberto Bascuñán-, el joven estaba junto a Oscar Leopoldo Rogel, su suegro.

Al otro día de su desaparición, Luciana Rogel, su entonces pareja, se desplazó en su auto a vender la ropa de Acosta, cuestión que fue provada y por la que quedó imputada. Sobre la desaparición de Acosta, a pesar del reclamo de su familia, todavía no hay pruebas.