Sergio Ongarato es uno de los doce intendentes y jefes comunales multados por el Tribunal de Cuentas provincial por rendiciones tardías. El organismo controla los movimientos de los municipios que no tienen Carta Orgánica, como el caso de Esquel y Trevelin (Héctor Ingram también figura entre los sancionados) y en casos como estos las sanciones se aplican a los sueldos de los funcionarios y no al municipio.

En diálogo con Notas de Radio por FM Sol, Ongarato sostuvo que "esto no es nuevo" y aseguró que se debe a problemas administrativos. "Acá se han hecho presentaciones, lo he hablado con la gente de Hacienda porque nos llegan cartas permanentes. Lo que ha pasado con una rendición del año 2021 es que se envió desde la Municipalidad y después llegó la nota de que faltaba una documentación", explicó el intendente. 

Relató que ante la contestación de que eso que les reclamaban estaba en una de las cajas, desde Rawson siguieron negándolo y el director de Administración de la municipalidad envió la fotocopia de lo que debería haber llegado a la capital. "Parece un diálogo de sordos", consideró Ongarato que insistió en que todo fue enviado correctamente, en tiempo y forma. 

"Ha habido algunos cambios, creo que tiene que ver más con cuestiones de orden administrativo que con la falta de rendición", señaló el mandatario municipal. Asimismo, resaltó que el intendente, el secretario de Hacienda de turno y el director de Administración son multados: "Da bronca porque no sé si voy a tener que ir yo en persona a entregar las cajas y que me cuenten los expedientes delante mío".

"Por el sistema de bolsín como se ha hecho históricamente no funciona. Nos cuesta erogaciones de nuestro patrimonio cuando las cosas se hicieron", cuestionó Ongarato, al tiempo que defendió al responsable de la parte administrativa señalando que "es prolijo, cuidadoso y detallista": "Confío plenamente en el director de Administración de la municipalidad, la actual secretaria de Hacienda y quienes han estado anteriormente".  

Añadió que "no es la primera vez": "Si tengo que ir personalmente dejo de hacer mi trabajo, lleva mucho tiempo".

"El tribunal de cuentas nos ha demorado licitaciones en tiempos de alta inflación. Fracasó una compra de camionetas porque cuando llegó la aprobación los vehículos tienen un valor totalmente distinto", contó.