La semana pasada Camuzzi retiró el medidor de la Escuela N°54 tras detectar una pérdida de gas, por lo que el establecimiento permanece sin actividad hasta que se realicen los trabajos necesarios y vuelvan a habilitar el servicio. 

Graciela Roberts, vice directora de la institución, señaló que ante tal situación tuvieron que reubicar a los alumnos para que “las clases presenciales continúen” y “para que los alumnos estuvieran en un lugar donde pudieran seguir teniendo contacto con sus docentes”.

Indicó que “los alumnos del turno tarde están cursando en la Escuela 210 del barrio Badén, los cursos de 5° grado están en la Escuela Salesiana donde funcionaba Inacayal, y otros en el Salón Aonikenk de la Cooperativa 16 de Octubre”.

Al ser consultada por la respuesta de los padres ante esta situación, explicó que es están frente a un contexto que ha modificado algunos aspectos y consideró que es entendible el malestar que puede ocasionar. En este sentido, afirmó “todavía nos estamos adecuando”.

"Los padres están un poco sorprendidos igual que nosotros porque este asunto fue de un día para el otro", sostuvo la vice directora.

Más adelante, afirmó que habían detectado fallas en los caloramas, las cuales “habían sido denunciadas en la delegación administrativa, quienes había solucionado el asunto”.

Con respecto al problema actual, informó que la solución “es rever toda la instalación”, teniendo en cuenta que cuando fue retirado el medidor les informaron desde el ente que “habían altos niveles de monóxido de carbono”. 

Manifestó que están trabajando en la planificación de las actividades para que puedan seguir con las clases a pesar de la problemática que mantiene cerrado el establecimiento.