Se trata de Daniel Cabrera, un condenado a dos años de prisión en un caso por violencia de género. Debía presentarse ante la Justicia y no lo hizo, ahora es intensamente buscado, pesa en su contra una orden de detención. 

El pasado 20 de mayo la jueza de garantías Karina Breckle lo halló culpable por delitos vinculados con violencia de género en contra de la mujer con la que convivía. 

Daniel Cabrera es un empleado del Ministerio de Educación que ya había purgado una condena por homicidio que terminó de cumplir en el año 2014 en la Unidad 6.

Por ser reincidente, deberá purgar una condena de dos años de efectivo cumplimiento, más una multa de 10.000 pesos, honorarios y costas del proceso. 

Hasta que la condena quedara firme, la magistrada además resolvió la prohibición de acercamiento de Cabrera a su ex pareja, ni mantener cualquier tipo de contacto.

 Habiendo agotado los recursos, y firme la sentencia, debía presentarse a la Oficina Judicial y no lo hizo.

Los hechos de violencia de género datan de una relación de pareja iniciada en el año 2008 en la provincia de Buenos Aires, y que se mantuvo a pesar de una condena por homicidio en la que la víctima fue una mujer.

Las situaciones de amenazas, hostigamiento e incluso intentos de asfixiarla se reiteraron durante varios años hasta que en marzo del año pasado le apuntó a la cabeza con una escopeta que en el juicio quedó demostrado que estaba apta para ser disparada. Además el imputado no estaba autorizado a su portación.

Para la jueza Breckle los hechos fueron probados, no solo por los dichos en general de los testigos, sino por el testimonio de la víctima, al que calificó como “creíble y coherente” al narrar el calvario que vivió durante muchos años, siendo la primera golpiza que sufrió en el año 2012. 

De allí en más las denuncias fueron numerosas. “Reconozco que el Estado no le dio ayuda en todo este tiempo”, dijo Breckle en su resolución.

“La ineficacia judicial propició y envió un mensaje como que la violencia puede ser aceptado en el diario vivir, perpetuando esa situación”, agregó.

Los delitos que fueron imputados contra Cabrera son los de amenaza agravada por arma, tenencia ilegal de arma de uso civil, amenaza simple, todo enmarcado en la Ley de protección de las mujeres. 

Además del carácter reincidente por la pena de homicidio que le impuso un juzgado de Misiones. Deberá cumplir una pena de dos años de efectivo cumplimiento.