El Tribunal Oral en lo Criminal N° 25 condenó a la pena de prisión perpetua a los oficiales Gabriel Isassi, Fabián López y Juan José Nieva por el asesinato de Lucas González

En una sala colmada de amigos y familiares de la víctima, el Tribunal leyó la sentencia en la que también condenó a seis efectivos a penas de entre cuatro y ocho años de prisión. 

En tanto, absolvió a otros cinco acusados por el encubrimiento del crimen. El 23 de agosto se leerán los fundamentos del fallo.

Los jueces hallaron culpables como coautores a los tres oficiales de brigada del homicidio quintuplemente agravado por haber sido cometido con arma de fuego, con alevosía, con odio racial, en concurso premeditado de dos o mas personas y abusando de sus funciones como fuerzas de seguridad. 

También los condenaron por la tentativa de homicidio de los tres amigos de Lucas, con idénticos agravantes. Uno de esos jóvenes es Niven Huanca, quien vivía en Esquel antes de instalarse en Buenos Aires.

Niven Huanca, el joven de Esquel que viajaba con Lucas González, el joven que murió baleado por policías porteños. (Telefé Noticias)

El caso

Lucas fue asesinado el 17 de noviembre de 2021 por la mañana, después de que saliera con sus amigos de entrenarse en Barracas Central. 

Fue perseguido e interceptado por un auto sin identificación en el que iban los tres agentes de la Brigada. Issasi, López y Nievas dispararon contra el Suran de los chicos y una bala entró en la cabeza de González, quien murió horas más tarde en el hospital El Cruce, de Florencio Varela.

Niven Huanca, que viajaba en la Volkswagen Surán con el futbolista asesinado, contó: “Fuimos a probarnos a Barracas Central, me conocía con Joaquín que estaba atrás. Salimos, compramos un jugo en un kiosco, avanzamos dos cuadras y vemos que bajan de un auto con armas”.

En diálogo con Telefe Noticias, el joven aseguró que en ese momento pensó que se trataba de delincuentes. “Pensé que me robaban todo porque parecían chorros, bajaron con el arma en mano como para robar directamente”, expresó.

Los agentes nunca se identificaron y bajaron de un auto a punta de pistola. Al confundir la secuencia con un robo, el conductor de la Surán, Julián, intentó escapar y fue entonces que comenzaron los tiros. “No parecían policías”, reafirmó Huanca.

“El amigo que conducía al ver esta situación intenta doblar para la izquierda, y ahí es cuando escuchamos cinco disparos. Lo tenía a Lucas adelante y veo que le sale una bala de un costado. Ahí Joaquín, que estaba al lado mío, dice: ‘Está muerto, lo mataron’”, relató el joven.

Fuente: InfoBAE / Página 12 / La Nación / Telefé Noticias