Por Milagros Nores 

Al igual que con los varones, hay un lugar para cada mujer en el Rugby. Sin embargo, durante décadas han sido solo espectadoras. En Argentina hace 25 años se disputó el primer partido de mujeres entre los clubes Alumni y Gimnasia y Esgrima de Ituzaingó. Recién hace 15 se formó el primer equipo femenino y el primer torneo oficial se pudo ver hace no más de un año atrás.

A fuerza de taclear prejuicios, las chicas fueron ganando un resistido espacio a lo largo de los años. En el 2005 la Unión Argentina de Rugby le dio un impulso al cupo femenino motivada por el deseo de que fuera una disciplina olímpica, que debe ser practicada por hombres y mujeres. Hoy, la UAR cuenta con cinco mil jugadoras federadas y el equipo nacional de rugby femenino -"Las Pumas"- es una selección fuerte en Sudamérica, aunque sigue luchando con históricas desigualdades.

Sin dudas, la inserción de la mujer en el rugby es una de las revoluciones más potentes en la historia del deporte, en el sentido del quiebre que produce en históricos prejuicios culturales asociados con la rudeza, la fuerza y el físico enorme vedado a las mujeres. "No hay diferencias en el rugby femenino y el masculino" explica el entrenador de las Dogas del Esquel Rugby Club (ERC), Luis Rapela, quien ya transitó por la experiencia en Barcelona y Galicia, donde el rugby femenino está en boga desde hace varios años.

Rugby femenino: Conocé a “Las Dogas” de Esquel
Las Dogas dan vuelta a la cancha del ERC

Las Dogas son el equipo más nuevo de la Unión de Rugby de los Lagos del Sur (URLS). "Somos la primera división con más cuadras y el único club que tiene prácticamente completas sus dos categorías femeninas: juveniles y primera" dice Luis. El club cerró la temporada 2019 con 25 jugadoras en Primera, 14 en Juveniles y otro tanto en infantiles, que son mixtos hasta los 14. Se trata de los equipos más nuevos en participar de la URLS, integrada por Bariloche, El Bolsón, Lago Puelo, Dina Huapi, San Martín y Esquel.

El rugby en Esquel comenzó hace unos cuatro o cinco años, pero no había continuidad. Luis comenta que él volvió a Esquel, su pueblo natal, en el año 2017 y detectó que faltaba entrenador para las chicas que ya comenzaban a acercarse. "Lo que nos pasaba es que empezaban un montón pero quedaban tres o cuatro. Entonces entendí que había que separarlas y formamos Juveniles y Primera. Ahí ya tenés una diferencia con los varones, porque a partir de los 18 años las mujeres ya están en Primera".

Rugby femenino: Conocé a “Las Dogas” de Esquel
Las Dogas del ERC

"El año pasado arrancamos con más fuerza. Elegimos capitana, que es Gina Jara. Y a partir de ahí hubo mucho más unión de grupo y seguimos bien formados. Tuvimos tres encuentros y este año el 14 de marzo empezamos con el fixture, en Bariloche. Siempre es a modo de encuentro. El Seven son dos tiempos de 14 minutos. Vamos sumando puntos y va ganando el torneo el equipo que más sumó". Los equipos de la región tienen dos o tres años jugando, Las Dogas seis meses. "Hay una diferencia que se nota pero la vamos acortando de a poquito" se confía Luis.

Rugby femenino: Conocé a “Las Dogas” de Esquel
El entrenador Luis Rapela y su doguita Arwyn
Rugby femenino: Conocé a “Las Dogas” de Esquel
Entrenamiento de Las Dogas

El modo de juego y los beneficios del rugby

Rapela remarca que no hay diferencias en el planteo de juego del rugby para mujeres. "El rugby femenino tiene el mismo formato. Todos tenemos un gusto por el contacto con el otro. Es una necesidad. El tacle, el ir corriendo hacia el otro... En el caso de las mujeres claramente están en una transición. No te preparan desde chica para un deporte así y lógicamente no las voy a exponer de entrada. En el nivel de contacto si venís de cero aprendés las bases de cómo caer y recibir un golpe. Pero después no hay ninguna contemplación" aclara.

Rugby femenino: Conocé a “Las Dogas” de Esquel
Entrenamiento de Las Dogas

#EnVideoEQS Uno de los momentos del entrenamiento.

"El rugby se transforma en una segunda familia adonde vayas. Es contención y apoyo. Todo el tiempo te está dando amistad. Eso vivo desde chico y eso trato de devolver como entrenador" resume Luis.

Gina Jara, la capitana, también tiene una linda experiencia para sumar: "el rugby contagia un estilo de vida mejor, la alimentación, el cuidado del cuerpo, la amistad. Se fomenta mucho la inclusión en el equipo femenino. Hay chicas y mujeres de los Hogares, y personas con distintas enfermedades. Para seguir participando en los entrenamientos no podemos tener problemas delictivos, tenemos que ser buenos ciudadanos. Pero acá la contención está en todo, desde la ayuda para los que no tienen los medios económicos a los que tienen un tema de salud".

#EnVideoEQS Gina Jara, Jenny "la china" Rojas y Karen Meza invitan a las mujeres a participar y responden ¿Qué te da el rugby?

Las Dogas entrenan lunes, miércoles, viernes y los sábados con todas las divisiones. En su perfil de Instagram @dogaserc van posteando novedades.