Sin dudas el efecto pandemia puso los ojos del mundo en la salud pero, indefectiblemente, el parate general impactó también en la economía. En ese marco el comercio se vio muy golpeado y Esquel no estuvo ajeno, aunque cabe destacar que en Chubut la crisis económica por el atraso del pago de haberes del sector público ya era un golpe considerable.

En este contexto, y ante las recientes liberaciones de algunas restricciones que estaban impuestas desde el inicio de la contingencia sanitaria, EQSnotas.com dialogó con algunos comerciantes de la ciudad para conocer su postura y cuál es ahora su realidad.

Uno de los rubros que más sintió los efectos del Covid-19 fue el gastronómico. Carlos Crettón, propietario de Otto Beer, reconoció que lo ocurrido obligó a reinventarse en algunos sentidos. "Siempre cuidamos mucho el tema de la gente, el protocolo y el personal. Ahora aprovechamos estas instancias para poder hacer actividades especiales con bandas de distintos estilos", comentó. También ampliaron al máximo los sectores que aprovechan en el interior y en el exterior de la cervecería para tratar de paliar las limitaciones de capacidad.

Consideró que "hay muchas cosas que marcaron", no solo la pandemia. Por ejemplo, mencionó como importante la ordenanza de tolerancia 0. Afirmó que a partir de esta normativa "bajó mucho la afluencia de parejas, matrimonios grandes que venían a comer". "Lo vemos como algo negativo porque si bien es una cuestión de responsabilidad social y todo lo que conlleva, hay mucha gente que dejó de venir al bar simplemente porque no puede disfrutar un vaso de cerveza y salir manejando", aseguró.

Según sus cálculos, el trabajo está en un 50% de lo que era anteriormente. Indicó que los horarios limitados de circulación nocturna eran "un problema importante" sobre todo en temporada alta turística, porque en la baja no hay tanto tránsito y a su vez existe cada vez más oferta gastronómica.

¿Fue tan grave la crisis provincial como la pandemia? Al respecto, Crettón opinó que "lo que más influyó fueron las restricciones, porque con el tema de los sueldos la gente se fue acomodando y sabe qué gastar y qué no, cuánto puede y cuánto no, pero si vos tenés para gastar y te dicen que no podés circular son efectos que van restringiendo".

Carlos Crettón, propietario de Otto Beer.
Carlos Crettón, propietario de Otto Beer.

El comercio mayorista de alimentos

Por su parte, Hugo Romero, dueño de Distribuidora Nahuelpan, señaló que en su rubro hay algunas particularidades que lo diferencian de otros: "En el caso nuestro particularmente la apertura del resto de los comercios hace que decaiga la venta. Estuve como comercio esencial, eso hizo que no tuviera una caída de venta como lo tuvo el resto". "Ahora sí lo estoy sintiendo porque se diversifica el consumo y hay una economía muy alicaída", planteó.

Sostuvo que la facturación está en niveles del 2019 pero, claro, con la inflación que provoca que en términos reales sea inferior. En este marco, subrayó que para él la crisis provincial sí fue algo clave: "El pago atrasado de salarios fue fundamental para Esquel, que vive casi en un 90% del salario público provincial. Al no cumplir con eso el gobierno considero, y en mi rubro, que es más grave que la misma pandemia".

"Yo creo que tenemos que ir para otro lado para que esto mejore". Aseveró que hay que "hacer un recambio a nivel tributario o laboral. Si al comercio le reducís aportes y le reducís algún que otro impuesto va a ir a la toma de empleados, si no los gastos no te dan para tomar más gente", apuntó.

Romero indicó que "los sueldos y los impuestos aumentaron" y de esa forma "es muy difícil" generar más puestos de trabajo, lo que conduce a más desempleo y menos consumo.

Esquel: la pandemia afectó la economía pero no fue lo único

Los kioscos, todo terreno pero afectados

Otro sector saliente dentro de la estructura comercial es el de los kioscos. Martín Cánova, dueño del local 'Avenida' en Alvear y Roca, también notó que la venta "ha caído muchísimo". De todas formas, dijo que ahora "se está notando un pequeño repunte, pero después de la pandemia es complicado"

"Esta última semana, con el tema de las habilitaciones y La Hoya se nota más movimiento" en la zona céntrica, afirmó. Sobre todo, remarcó que ve tránsito de turistas.

De todas formas, al igual que Romero, opinó que los efectos de la crisis provincial son de suma importancia porque "veníamos mal y la pandemia sumó para que empeore. Estamos bastante peor que antes", sostuvo. "Se ha notado eso, que casi todas las semanas aumenta una cosa, aumenta la otra, la gente que cobra tarde", agregó.

Silvina Flores, propietaria del kiosco 'La Poli', advirtió que ellos siempre trabajaron mucho con la escuela Politécnica ubicada enfrente y por esto los problemas de la provincia trajeron un efecto inmediato: "Las ventas hace mucho tiempo en el rubro de kiosco-almacén han bajado un montón, no solamente por la pandemia sino también por la crisis provincial, nosotros estamos en un lugar donde antes de esta crisis, hasta hace 3 años más o menos, trabajábamos mucho con los tres turnos de la escuela".

La pandemia obligó a afinar la creatividad para salir a flote y cumplir con "nuestra prioridad, que es el pago a los empleados". En este marco, enfatizó: "Las redes sociales nos salvaron".

Incursionaron en el delivery y las ventas por internet que "ayudaron un montón", aunque de todas maneras bajaron las ventas y trabajaron más: "Todo el tiempo estuvimos armando promociones. No cerramos las puertas y eso fue importantísimo, no solamente en lo económico, también en lo mental". "Fuimos creo que los primeros en empezar con el delivery y recorrimos con eso todo Esquel, llevábamos hasta un atado de cigarrillos al barrio Badén estando del otro lado de la ciudad", comentó.

"Ahora se está viendo más gente, los chicos van a la escuela, aunque creo que no están el 100%, se nota otro movimiento", advirtió la comerciante. El verano suele ser una buena época para ellos gracias a su ubicación, en la salida de la ciudad hacia atractivos turísticos como el Parque Los Alerces. Tienen expectativas por lo que puede ser la temporada veraniega que se avecina.

Esquel: la pandemia afectó la economía pero no fue lo único

El turismo y los servicios directos e indirectos complicados

El turismo sufrió sin lugar a dudas efectos de los más graves por la pandemia. Se trata de uno de los sectores que más tardó en retomar su actividad por las limitaciones para circular. En Chubut "la crisis provincial y el atraso de la capacidad de compra del salario con respecto a la inflación ya venían afectando desde hace varios años", destacó Juan Manuel Caplonch de Frontera Sur.

"A pesar de venir de una buena temporada de verano en lo turístico, en 2021 no termina de despegar y llegar a valores pre pandemia. La falta de nieve jugó en contra en una época del año fuerte para la venta de indumentaria y calzado necesario en nuestras latitudes. Lo mismo con el equipo más técnico del aficionado a los deportes de nieve como el esquí y el snowboard", señaló. Contó que se adaptaron a la nueva situación "con cambios menores como en los horarios", pero manteniendo el equipo de trabajo y la variedad de marcas.

En el mismo sentido, Caplonch explicó: "Se compra menos y las apuestas para cada temporada son lo justo y necesario. Creemos que va a empezar a notarse más sobre fin de año la recuperación, si hay un fuerte flujo de turismo en la temporada estival se va a acentuar. Faltan medidas mas concretas de apoyo al comercio a nivel municipal y provincial. Va a costar mucho recuperar el capital de trabajo y mucho más generar empleo".

Esquel: la pandemia afectó la economía pero no fue lo único