El Gobierno del Chubut, a través de la Secretaría de Salud provincial, recuerda a la comunidad una serie de medidas de cuidado que es importante tener en cuenta para prevenir la infección por Hantavirus, ya que durante la temporada de verano aumentan las actividades al aire libre y las tareas frutihortícolas en la zona cordillerana.

Las recomendaciones fueron brindadas desde el Departamento Provincial de Zooantroponosis, dependiente de la Dirección Provincial de Patologías Prevalentes y Epidemiología de la cartera sanitaria.

Medidas de prevención

En ese sentido, se recomienda, tanto a los residentes de la cordillera como a los turistas que visiten la zona, que ventilen los recintos que hayan permanecido cerrados por mucho tiempo, como galpones, cabañas y caballerizas; humedezcan el ambiente antes de barrer, para así evitar que se levante polvillo; si encuentran un ratón muerto, se protejan con guantes, y antes de recogerlo, lo rocíen con cloro (lavandina), lo coloquen en doble bolsa, lo entierren o lo quemen, y al finalizar la tarea se laven las manos.

Además, se recomienda mantener protegidas las fuentes de abastecimiento de agua; eliminar malezas del patio, sellando previamente posibles accesos a la vivienda; tapar los agujeros de la casa con materiales resistentes; proteger los alimentos manteniéndolos en envases herméticos y depositar la basura en recipientes con tapa.

Asimismo, se indica que, si fuera evidente la existencia de roedores, antes de asear las áreas posiblemente contaminadas, se debe rociar con abundante solución de agua con cloro (lavandina), realizar la recolección de leña con guantes o lavarse bien las manos luego de esa actividad. Si se efectúan tareas rurales, además, se debe usar calzado cerrado, ropa que cubra todo el cuerpo, y guantes y barbijos para no respirar polvillo contaminado.

Una vez terminada la tarea rural o de jardinería, se recomienda cambiarse y ventilar la ropa usada.

Por otra parte, se indica a la comunidad que en caso de acampar se deben elegir lugares libres de malezas, recorrer senderos habilitados, con ropa y calzado adecuado, beber solo agua segura (potable, envasada, hervida o clorada), y mantener la basura en recipientes cerrados (si es necesario enterrarla).

También se recomienda no recolectar frutos silvestres y hongos en lugares donde se evidencie la presencia de roedores, ya que los mismos usan la vegetación como refugio para anidar, reproducirse y alimentarse.

Características de la enfermedad

Los hantavirus se transmiten fundamentalmente por la inhalación de aerosoles cargados de virus provenientes de heces, orina y/o saliva de roedores infectados.

Otras posibles vías de transmisión son el contacto con excrementos o secreciones de ratones infectados con las mucosas conjuntival, nasal o bucal, o mordedura del roedor infectado, y también existe evidencia de transmisión aérea de persona a persona.

Síntomas

El síndrome cardiopulmonar por hantavirus puede presentarse como un cuadro leve con un síndrome febril inespecífico o llegar hasta la manifestación más grave con insuficiencia respiratoria grave y shock cardiogénico.

Los primeros síntomas son similares a un estado gripal, fiebre 38°C, dolores musculares sin compromiso de vías aéreas superiores, escalofríos, cefalea, náuseas, vómitos, dolor abdominal y diarrea.

Si bien es difícil de precisar, el período de incubación fluctúa entre 7 y 45 días, por ello son relevantes las acciones de control de foco de contactos estrechos de un caso positivo, así como las acciones ambientales preventivas, a fin de evitar la aparición de casos secundarios.

Ante ello, se indica a la comunidad que, ante la presencia de alguno de estos síntomas, se debe recurrir en forma inmediata al centro sanitario más cercano.