Finalmente, se publicó en el Boletín Oficial la reglamentación de la ley que habilita a cualquier usuario que desee invertir en energía limpia o renovable para autoconsumo, por ejemplo solar, pueda inyectar su generación excedente a la red de energía pública con múltiples beneficios a mediano y largo plazo.

El cambio de paradigma no es automático, y requiere de voluntad política provincial para adherir a la ley nacional, regularla e implementarla.

El sistema, denominado "Régimen de fomento a la Generación Distribuida de Energía Renovable integrada a la red eléctrica pública", tiene aún un largo camino por recorrer y no ha generado la confianza en todos los sectores, especialmente quienes deben reconvertir su negocio: cooperativas y distribuidoras de electricidad.

El caso de Esquel es diferente, porque ya dio el puntapié inicial con la firma del primer convenio firmado con un establecimiento que comenzó a generar y vender su propia energía, pero está en proceso experimental.

Uno de los referentes de este sistema a nivel regional es el emprendedor local dueño de Huella Cero, Gery Green, quien también lideró el primer caso en Chubut, y es el impulsor de la Ley de Adhesión que se encuentra en Comisión a partir de la presentación del diputado Manuel Pagliaroni.

En diálogo con EQSnotas, Green manifestó que la reglamentación de la ley resultó "mejor de lo que esperaba". En su caso, ya trabaja con la parte técnica de la Cooperativa 16 de Octubre pero aún no se ha previsto cuál será el rol de la entidad en el ofrecimiento del servicio.

Entre los puntos que pide la Ley de Adhesión se sugiere que los edificios públicos nuevos cuenten con la instalación de sistemas de energía distribuida; eximir del cobro de impuestos nacionales a los usuarios que inyecten energía a la red y que se analice este sistema para la crisis energética de las comunas chubutenses.

Al respecto, Green comentó que esto último es "Factible técnicamente. Le hice una propuesta a Paso del Sapo para que dejen de usar gasoil e implementar el autoabastecimiento. Directamente funcionarían con paneles, molinos y baterías de litio gigantes, hasta hay financiamiento y leasing de equipos. Ni hablar de que la energía es más barata".

La autoridad de aplicación es el Consejo de Energía que depende del Ministerio de  Infraestructura provincial. "Esta ley tiene en cuenta a las cooperativas, no es una amenaza. Ellos deberían ya estar asesorando y capacitando al personal para lo que se viene".

Green comentó que con el aumento de la tarifa eléctrica, las consultas por este tipo de energía crecieron, pero en invierno se plancharon con la suba del dólar. Un equipo de paneles solares, junto con el inversor para transformar la energía del panel a energía alterna y coordinar la frecuencia de lo producido y lo recibido cuesta para una casa grande entre 200 a 250 mil pesos. "Se amortiza rápidamente" asegura Green.

¿Cómo funciona el sistema?

Una vez que el usuario verifica la capacidad de instalación de su hogar deberá celebrar un contrato de Generación Eléctrica Distribuida con la instalación de un Equipo de Medición bidireccional (autorizado) y conexión a la red de distribución.

"El Sistema prevé que la cooperativa está obligada a pagar la luz al usuario si inyectó más energía de la que consumió. En caso de que el balance le dé negativo al usuario, debe pagar la energía que consumió y se le descuenta lo que generó. Cuando el balance es positivo para el usuario, va a ir generando un crédito a su favor y en no más de dos meses la cooperativa deberá pagarle" precisó Green.

"Por ejemplo en la provincia de Santa Fe, hasta que amortizás tu inversión te pagan más caro la energía que vendés que la que pagás.  Por ejemplo, si estás pagando 4 pesos el kilowat, y decidís generar e inyectar, la coop te estaría pagando 20 pesos el kilowat. Una vez que terminás de pagar los equipos, te equiparás con lo que la cooperativa paga por la energía a Cammesa, por ejemplo".

En el caso de Esquel, el único acuerdo existente no funciona con el mismo porcentaje, sino que se paga un 10% más de lo que la cooperativa paga a Cammesa. De todos modos, aún resta conocer la aplicación definitiva.

Justamente, la ley prevé un fondo que crea Nación de 800 millones de pesos para el año 2019, destinado a financiar esa diferencia en el precio del kilowat que deberá pagarse por el inyectado a los usuarios.

La voluntad política de subirse a la ola de renovables es lo que puede acelerar los cambios hacia una generación autosustentable, como ya conquistaron tantos hogares y empresas en países vecinos y en Europa.

Foto: FB: Huella Cero