Dario Zoilán, admitió -ante el Departamento de Seguimiento de Causas de Violencia Institucional y Delitos de Interés Federal del Ministerio de Seguridad- haber efectuado "uno o dos disparos" con postas de goma a seis metros de distancia, a través de una barrera tupida de sauces, a un manifestante que cruzaba el río Chubut.

El gendarme Echazú, escopetero, volvió de ese operativo con fractura de pómulo.

Sus testimonios podrían echar luz sobre lo que pasó el 1 de agosto a la vera del río, donde se perdió el rastro de Santiago Maldonado.

Allí consta, por ejemplo, que el gendarme aseguró que escuchó tiros "del otro lado" y reveló que él estaba armado con una escopeta con postas de goma "para no dejar que se acerquen los manifestantes".

Caso Maldonado by EQSnotas on Scribd