En la tarde de ayer se convocó a la primera mesa de trabajo para inaugurar el debate sobre el futuro de La Hoya tras la definición provincial de que el cerro pase a manos privadas.

Sin embargo, aún no queda claro para ese espacio de discusión si la definición es privatizar, concesionar o un formato mixto. La expectativa era discutir formas de administración en este primer encuentro para luego precisar contenidos desde la impronta local. Sin embargo para Rubén Alvarez, participante del encuentro en representación de los empleados, el abordaje se hizo con forma de taller sin espacio para hablar de otras alternativas.

Cabe recordar que desde el Ente Mixto se había pedido un plazo de un año para poder evaluar mejor esta alternativa y tampoco tuvieron respuesta.

Desde el sector de los trabajadores del cerro, Álvarez se mostró sorprendido por el formato de taller que propusieron para "aportar" ideas al pliego de licitación.

"Nos sorprendió porque no hubo espacio para sugerencias de otro formato posible de administración del cerro. Nuestra presencia allí no tiene sentido si la definición es privatizar. Como trabajadores nos sentimos casi excluidos. Es como ir a organizar tu propio velorio" manifestó.

Álvarez sugirió en una próxima reunión que pueda discutirse otro esquema posible y tener mayor certeza sobre los tiempos que se manejan. "La Hoya es un capital bastante importante. Normalmente pliegos de esta magnitud se hacen con asesorías y consultoras con experiencia en contratos comerciales. Me pareció bastante liviano el formato para tomar una decisión tan importante". 

"No encontramos que era el lugar apropiado para sugerencias de buena voluntad cuando estamos hablando de un mega negocio" recalcó luego.

Más adelante, concluyó: "Nos preocupa mucho la cuestión técnica del cerro, nosotros manejamos el transporte por cable, llevamos gente al lugar para que desarrollen una actividad. Necesitamos conocer más detalles del formato que se está discutiendo para poder sugerir y participar".