"Le hemos torcido el brazo con la lucha a una parte del poder", aseguró Jones Huala en un audio difundido hoy, en el que anunció que suspendía la medida de fuerza y alentó a las comunidades mapuches a seguir la lucha contra las mineras, las petroleras y las forestales.

Para la ceremonia del lunes, el jefe de la comunidad resistencia Cushamen pedía que  autoricen el ingreso de 28 personas a la cárcel, con varios elementos algo que fue rechazado de plano por el Servicio Penitenciario Federal, ya que va "en contra de los protocolos vigentes de seguridad", explicaron a Télam fuentes del organismo.

Finalmente, la abogada de Jones Huala, Sonia Ivanoff aceptó la consigna de reducir el número de invitados a la celebración a 15 personas para festejar el "Wiñoy Tripanto", como denomina la cosmogonía mapuche al solsticio de invierno.

En un principio, Facundo Jones Huela había iniciado la huelga de hambre en rechazo al pedido de detención de su hermano Fausto y de Lautaro González, a lo que se sumó luego el reclamo para realizar el lunes dentro de la cárcel la ceremonia comunitaria.

Con el paso de los días, Jones Huala endureció la huelga y dejó de ingerir líquido.

El dirigente mapuche está detenido en la Unidad 14 de Esquel a la espera de que la Corte Suprema de Justicia se pronuncie sobre una apelación a su extradición a Chile, que el juez federal Gustavo Villanueva decidió el 5 de marzo pasado, para lo cual habría una audiencia el próximo 3 de julio.

Entidades como Argentinos Para la Victoria de España e Italia, Red de Defensa del Pueblo Mapuche de Italia y red internacional Conaicop impulsaron una campaña para difundir el reclamo y promover la solidaridad con Jones Huala.

Ante los avances en el diálogo con el Servicio Penitenciario Federal, el jueves pasado volvió a ingerir líquidos, pero continuó con la huelga de hambre hasta el sábado, tras las novedades con respecto a la celebración, indicó Télam.