El escuadrón 36  "Subalférez D. Guillermo Nasif" de Gendarmería Nacional, a cargo del Comandante Principal Leandro Cueto conmemoró un nuevo aniversario del Bautismo de Fuego en el Teatro de Operaciones del Atlántico Sur  (TOAS) durante Malvinas.

Por otra parte se formalizó la recepción y cambio de Bandera de Guerra de la Unidad, que corresponde al nuevo nombre del escuadrón: "Subalférez D. Guillermo Nasif", y fue donada por una organización interna de la fuerza a nivel nacional.

En la ceremonia se hizo un reconocimiento al Suboficial My Julio Gibbons Capandeguy quien formó parte del grupo Alacrán que protagonizó ese bautismo de fuego. El reconocimiento partió de los integrantes de la fuerza y generó un momento muy emotivo para todos los presentes.

La Plaza de Armas fue el escenario de esta ceremonia que contó con la presencia de autoridades locales y familiares de la fuerza.

Gendarmería recordó el 37º aniversario del Bautismo de Fuego
Gendarmería recordó el 37º aniversario del Bautismo de Fuego
Gendarmería recordó el 37º aniversario del Bautismo de Fuego
Gendarmería recordó el 37º aniversario del Bautismo de Fuego
Gendarmería recordó el 37º aniversario del Bautismo de Fuego

El Bautismo de Fuego

Durante la Guerra de Malvinas se conformó un comando especial de Gendarmería, que se autobautizó "Escuadrón Alacrán". Diferentes unidades del interior del país arribaron a las islas Malvinas para ser incorporadas a la compañía de comandos 601 del Ejército Argentino.

Eran individuos con una capacitación especial para llevar a cabo operaciones tipo comando, siendo esa su misión en el Teatro de Operaciones del Atlántico Sur. Cuarenta gendarmes se reunieron en Comodoro Rivadavia y partieron un 28 de mayo a bordo de un avión Hércules C 130 de la Fuerza Aérea Argentina. Serían los únicos en poder pasar a las islas.

El bautismo de fuego se denomina al momento en que el helicóptero que transportaba a los efectivos fue alcanzado por un misil el 30 de mayo por la mañana, luego de sobrepasar las últimas posiciones argentinas en las islas. El piloto logró evitar que se estrellara la nave y fueron rescatados sus sobrevivientes. Hubo seis gendarmes fallecidos en esa primera misión.