Poco a poco se va despejando en la región la "masa de aire polar" que ingresó desde el martes y llegó con mucha fuerza a la cordillera.

El miércoles Esquel amaneció con nieve en sus cerros más altos y todos los condimentos de un temporal de lluvia, agua-nieve y viento fuerte que se mantuvieron durante todo el día y  obligaron a bajar el ritmo y guardarse en casa, con la estufa prendida.

En un marco de buena ocupación turística, el meteorólogo Lucas Merlo se permitió tranquilizar a los visitantes y locales: hacia el fin de semana volvemos al verano.

"Es una situación atípica que sucede en los sistemas de baja presión sobre el Pacífico y ha favorecido este ingreso desde el sur, más bien polar. Ha traído mucho frío en la atmósfera y con mucha humedad y generó esta inestabilidad. El año pasado también tuvimos nevada en altura para esta época. Son fenómenos que de vez en cuando suceden pero ni bien pasan la temperatura vuelve a trepar".

"A partir de esta tarde hay mejora y promete hacia el fin de semana temperaturas superiores a 25 grados" anunció, aunque reconoció que "el viento va a estar presente por lo menos hasta mitad de mes".