Entre las grandes incógnitas que presenta la elección de este domingo 22 de octubre es el porcentaje distribuido de votos de los argentinos para tomar definiciones en primera vuelta o ir a un balotaje.

Es importante tener en cuenta entonces, cuáles son las condiciones que se deben cumplir para que haya una segunda vuelta, tras las elecciones de este domingo.

En principio, la base a partir de la cual se establecen las condiciones para definir una segunda vuelta es el total de votos válidos. Allí no se computa el voto en blanco. Esta aclaración es porque si bien el voto en blanco es un voto válido, en el caso de definir si hay Balotage o no, sólo se computan los votos hacia alguno de los partidos.

Por lo tanto, son dos las situaciones que deben tenerse en cuenta. La fórmula presidencial más votada debe obtener más del 45% de los votos o más del 40% y sacarle el 10% al segundo para ser proclamado en primera vuelta.

Sin embargo, en el caso que no se de ninguna de estas situaciones, habrá segunda vuelta entre las dos fórmulas presidenciales más votadas.

Ya en el balotaje, aquel candidato que obtenga la mayoría de votos, sin necesidad de una diferencia porcentual determinada, se erigirá como ganador de las elecciones y, por consecuencia, será nombrado como Presidente de la Nación.

Una hipotética segunda vuelta electoral está estipulada, según los plazos de la Cámara Nacional Electoral, para el domingo 19 de noviembre, puesto que las elecciones deben organizarse en el plazo de 30 días posteriores al primer comicio presidencial, en el marco del artículo 96 de la carta magna.