Se trata de una condición que impusieron a Ongarato los asambleístas del No a la Mina que ocuparon el edificio municipal por diez días: el viaje del intendente a Rawson para pedir que retiren el proyecto de zonificación de la Legislatura.

El intendente destacó que el municipio retoma su actividad normal este martes y confirmó que la conciliación con los manifestantes deja sin efecto la presentación judicial, aunque aclaró que "fue algo que no quería hacer, pero tuve que avisar en Fiscalía que yo no podía controlar la ocupación".

"Hoy están los ánimos más calmados" dijo Ongarato pero recordó que a raíz de la tensión social que se generó con los cortes y toma de municipios es que envió la nota a la provincia para que el gobierno retire el proyecto.

"Por el momento lo que hemos conversado con gente de Rawson y viendo los últimas noticias, está la reafirmación del gobierno provincial de continuar con la zonificación pero la justicia ha dicho que no se debe tratar. Hay una instancia que deben resolver en Rawson. Hubo alguna intención de poner a los intendentes como que podíamos definir esa situación y no es así. Ahora esperemos que cambien las cosas en el sentido que nosotros queremos" recalcó.