Navidad y Año Nuevo son dos fechas en las que los veterinarios tienen más consultas que de costumbre. No solo por la cantidad de mascotas que sufren accidentes producto de la pirotecnia sino también por la cantidad de dueños que no saben qué hacer para calmar a sus animales.

Y es que, a pesar de toda la información que se difunde acerca de sus efectos negativos, aún hay personas que celebran las fiestas de fin de año en compañía de uno de los grandes enemigos de los “peludos”: la pirotecnia.

¿Cómo afecta la pirotecnia a las mascotas y de qué manera ayudarlas?

Según el Centro de Control de Envenenamiento Animal de ASPCA (ASPCA por sus siglas en inglés), la pirotecnia puede afectar a las mascotas de las siguientes maneras:

1. Les genera miedo y ansiedad: debido a la sobrecarga sensorial, algunos perros y gatos tendrán una respuesta de lucha o huida. “Esta es una descarga de adrenalina muy real, que hace que su presión arterial y frecuencia cardíaca aumenten”, señala ASPCA.

Por eso, es importante mantenerlos en una habitación segura, en donde no puedan escuchar los sonidos de los fuegos artificiales, de preferencia con música tranquila de fondo y/o algo que pueda entretenerlos.

2. Les genera malestar gastrointestinal: aunque parezca difícil de creer, algunos perros comen fuegos artificiales que las personas dejan a su alrededor en las calles.

“Algunos fuegos artificiales contienen sustancias químicas que incluso pueden ser corrosivas para el revestimiento del tracto digestivo. Esta es una condición dolorosa que puede provocar vómitos con sangre y diarrea, deshidratación grave e infecciones secundarias”, puntualiza ASPCA.

3. Les produce disfunción de los glóbulos rojos: cuando se ingieren, los fuegos artificiales que contienen sales de clorato pueden oxidar los glóbulos rojos, lo que puede convertirse en una afección potencialmente mortal.

“Los animales con esta condición estarán letárgicos con encías de color marrón, gris o azul”, explica ASPCA. Estos síntomas pueden desarrollarse hasta 10 horas después de la ingestión de los fuegos artificiales. Por eso, hay que monitorear a las mascotas que han estado cerca de productos pirotécnicos.

Además, vale la pena resaltar que les produce salivación, taquicardia, vocalizaciones intensas, micción o defecación, entre otros signos que evidencian su malestar.

Prevenir y cuidar

Para tener unas fiestas seguras con tu animal, debes contribuir con que se sienta tranquilo y seguro. Aquí algunos consejos para lograrlo.

  • Mantén a tu mascota en espacios interiores: esto no solo evitará que tu mascota huya sino también que se lastime al intentar escapar de los fuegos artificiales.
  • Crea un espacio seguro: si tu mascota está acostumbrada a estar en una casita, este es el momento ideal para que tenga este espacio de forma accesible. Si no tiene un espacio seguro, puedes ponerla en una habitación pequeña con música de fondo. No olvides tener a la mano su cama, mantas y juguetes favoritos.
  • Prueba con aceite de CBD: el aceite de CBD es ideal para aliviar la ansiedad que sienten los perros y gatos con el sonido de los fuegos artificiales. Consulta con tu veterinario de confianza cuál es la dosis indicada.
  • Acostúmbrala a sonidos fuertes: algunas personas acostumbran a sus mascotas al sonido de los fuegos artificiales y/o a ruidos fuertes. Para realizar este proceso, debes aumentar el volumen de forma progresiva.
  • Aseguráte de que tenga un collar y una placa: Navidad y Año Nuevo son dos fechas en las que desaparecen muchísimas mascotas. Por eso, no está de más asegurarte de que tu engreído estará correctamente identificado en las fiestas de fin de año.
  • Agota su energía: “es menos probable que un perro mental y físicamente exhausto reaccione a los fuegos artificiales, así que planifique un día de actividades divertidas que lo dejarán listo para una siesta”, señala el portal PetMD, especializado en consejos de salud para mascotas.
  • Pedí ayuda profesional: si considerás que tu perro es sumamente nervioso y que puede lastimarse durante las fiestas, lo mejor es que converses con un especialista para saber si te recomienda la medicación.
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Fuente: La Nación