"Creíamos que estábamos seguros" cuenta Susana Rizzuto, una de las gestoras de Fupedes, la fundación que realiza equinoterapia y monta recreativa y funciona en un predio del hipódromo.

Por tercera vez sufrieron un robo estimado en 70 mil pesos, en materiales, entre ellos una montura especializada de equinoterapia que cuesta alrededor de diez mil pesos.  También un boyero eléctrico para que no se escapen los caballos, herramientas de desvasado y varios elementos más que se llevaron del container.

Susana Rizzuto cuenta que están las huellas que indican por dónde escaparon los ladrones:

"Agradecemos a los privados por la gran solidaridad que siempre muestran" cuenta Susana. Sin embargo, explica que nunca tuvieron apoyo de ninguna gestión de gobierno para poder tener un espacio propio. "Tenemos este container que lo pagamos en dólares y alquilamos baños químicos, pero necesitamos construir".

Más adelante Susana cuenta cómo creció la fundación en el servicio de rehabilitación, pero advierte que "este robo no lo hizo un improvisado. Es alguien que se tomó el tiempo de ir con una maza, que conoce el lugar y a nosotros".