La fiscal Rafaella Riccono pidió la realización de la audiencia para discutir la entrega de la llave de la casa en la que vivía Ana Calfín con su pareja, hasta el momento en que ocurrió el hecho por el que perdió la vida. La Fiscalía requirió que la llave se entregue al hijo mayor de edad. La Defensa se opuso y pidió que se le devuelva al imputado ya que en la vivienda están sus pertenencias personales. 

La fiscal expuso que el terreno le fue cedido a Ana por su padre, para que construya su vivienda. La construcción estuvo a cargo del sobrino de Ana y fue ella quien compró los materiales y pagó a su sobrino por la obra. Riccono indicó que el imputado vivía hace solo un año con la víctima y no tiene derechos hereditarios. Agregó que si bien este tema (la sucesión) debe discutirse en sede civil, es un dato interesante para traer a la discusión en sede penal.

Añadió luego que “nadie puede beneficiarse por su propio hecho delictivo”, que hay una investigación abierta contra el imputado por femicidio, por lo que no se le puede entregar a él la casa que era de la víctima. “Por lo menos no en esta instancia de la investigación”.

Riccono propuso que la primera visita a la casa sea con la madre del imputado, acompañada por policía, para que retire los objetos personales, que quede constancia de que no quede ningún bien que le pertenezca. Actualmente el imputado cumple prisión preventiva domiciliaria, en un domicilio diferente.

La defensora, Carolina García, pidió que la llave sea restituía al imputado, ya que se le secuestró a él. La entrega de la casa no está en discusión, ya que es una cuestión que deberá tratarse en sede civil. García pide que el día que cese la prisión preventiva de su defendido, pueda ingresar a ese domicilio en el que vivía y pueda recuperar sus cosas. “No se está pidiendo la propiedad del inmueble, sino resguardar la intimidad de una persona… que pueda retirar por si mismo sus cosas, no que sea su madre quién lo haga…”, dijo.

La juez Fernanda Révori puntualizó que su decisión nada tiene que ver con la titularidad del bien. Que no se discute que allí vivían Ana y quien era su pareja. Consideró que si la llave de la vivienda se le secuestró al imputado -quién está siendo investigado, pero es inocente hasta que se demuestre lo contrario- se le debe devolver a él.

Dispuso que la restitución de la llave sea en carácter de depositario judicial. No podrá disponer de nada de lo que haya dentro del domicilio, ni de la casa. Se deberá hacer primero un inventario pormenorizado de lo que hay allí y el día en que se le requiera la restitución deberá entregar todo lo que allí estaba, de no hacerlo cometerá el delito de depositario infiel.