Convivencia en cuarentena: cómo transitarla de la mejor manera

Por la Lic. Lara Kraiselburd.

Psicóloga clínica

La cuarentena que estamos viviendo es un momento de incertidumbre y estrés. Preocupaciones económicas, temores sobre la salud y todo mientras reajustamos nuestras rutinas y horarios, pasando mucho más tiempo en casa, con nuestras parejas y familia.

Muchos de mis pacientes comentan sobre problemas de convivencia. Están frustrados con sus parejas, tienen poca paciencia, no se escuchan mutuamente y se sienten desconectados.

Por eso hoy más que nunca es necesario ser un frente unido.

Lo que les funcionó antes en término de cómo se manejan las tareas domésticas, laborales, el cuidado de los niños, puede no seguir funcionando en este momento. Hay que redefinir y renegociar estos roles.

Cada semana, se pueden sentar especialmente a hablar sobre lo que hay que hacer, cuando es necesario hacerlo, de qué manera, etc.  Escriban todo lo necesario para la semana, para cada ítem, establecer el nivel de importancia (no tan importante 1 muy importante 10). Considerar que lo que no sea tan importante podrá ser hecho en otro momento. La clave de estas pequeñas reuniones es ser flexible.

Cada día, decidan quién va a estar con los niños en que momentos específicos, asígnense diferentes tareas para cada miembro (quien hace el almuerzo, quien lava los platos, quien sale a comprar, en qué momento van a ser realizadas estas tareas, etc.).

El acto de reunirse y escribir sobre las tareas los va a forzar a mirar juntos al problema a resolver,  literalmente, y como quipo podrán redefinir quien hace que.

Estar presentes

Tomarse un momento cada día para estar exclusivamente para el otro. Hablar. Algunas preguntas disparadoras de conversación pueden ser: "¿cómo estás?", "¿qué cosas te preocupan?", "¿hay algo que pueda hacer?", "¿que necesitas respecto de nosotros, tiempo juntos o separados?"

Un abrazo diario, un beso, la intimidad es clave para el bienestar. Aunque quizás el sexo pueda ser lo último en lo que piensen en este momento, el contacto físico (acurrucarse para ver la tele, agarrarse la mano, un masaje, etc.), libera oxitocina, una hormona para "sentirse bien".

Relacionarse positivamente

Ser crítico, atacar, estar a la defensiva, o peor, cerrarse, no va a hacer que mejoren las cosas en la pareja. Esto hará que se atasquen: genera hostilidad, enojo, frustración. Esta mezcla con el tiempo, genera resentimiento.

Ahora puede ser el momento para empezar a ser positivo en la relación, comprometido con el otro. Esto significa escuchar que preocupa a la pareja, empatizar con eso, mostrar atención, validar (próximo punto), ofrecer una mano, presencia, estar ahí.

Relacionarse positivamente también significa ser confidentes, hablar de los sentimientos, las preocupaciones. Significa lograr mostrarse vulnerable, dejar de lado el enojo por momentos, y priorizar estar conectados.

Validar los sentimientos del otro

Todos necesitamos ser escuchados y comprendidos. Irónicamente, esto puede ser muy difícil para las parejas cuando están bajo estrés, y en general nos concentramos en lo que el otro NO hace, o hace mal, o no nos gusta la manera en que está hecho. Esta posición de culpar al otro nos aleja de la habilidad de entender y conectar con el otro.

Durante este tiempo de incertidumbre y malestar, es clave intentar correrse del "culpar/ reclamar", a "validar".

Validar no significa que la otra persona TIENE RAZÓN y uno está equivocado. Es simplemente hacer notar que vemos y ACEPTAMOS las emociones y la experiencia del otro, sin dar consejos o tratar de que la emoción se vaya: "no llores", "no estés mal", y ni hablar del: "te quejas de lleno, hay cosas peores".

Validar no es tratar de "arreglar" lo que le pasa al otro, sino simplemente darse a uno mismo la oportunidad de ser testigo, ser curioso de lo que está viviendo el otro.

Cuando la pareja exprese una preocupación o una emoción, se pueden usar estos ejemplos para validar:

"Entiendo que te sentís....¿querés contarme más?"

"Está bien sentirse así"

"Entiendo que la estás pasando bastante mal, podes contar conmigo"

"¿Que necesitas, hay algo que pueda hacer para ayudar a que te sientas mejor?

"¿Me quisieras contar más de esto?

Reparar

Juntos están pasando esto, significa que no están solos en el mal trago. Esto es clave para tener compasión con nosotros mismos y con la pareja.

La compasión en una relación es ver a la pareja como a un amigo muy querido. ¿Qué le dirías a tu mejor amigo ahora mismo, desde una posición de amabilidad?

En este momento de incertidumbre, todos van a cometer errores, y vos también vas a volver loco a los demás. La clave es cuando ocurran los conflictos, rebobinar y reparar.

Reparar es reconocer el propio error, el haber levantado la voz, tomar responsabilidad por lo que toca, pedir disculpas, o bien dar una explicación del propio comportamiento (haciendo hincapié en el comportamiento propio en lugar de en el del ajeno).

Hablar de cuanto espacio necesitan juntos/separados.

En una rutina familiar normal, el espacio, tanto físico como emocional, es creado y mantenido por el trabajo, y por todas las actividades que tenemos que hacer, compromisos, cuidar a los chicos, vida social y muchas otras obligaciones, chicas o grandes. Todos estos "espaciadores automáticos" han sido removidos de golpe. No es extraño si se siente un poquito de tensión.

Todo el mundo necesita un poquito de tiempo a solas, y esto no tiene nada que ver con cuanto se ama a la pareja.

El tener una conversación sobre cuanto espacio está bien para cada uno, personal, familiar, de trabajo. Es importante ayudar al otro a entender que necesitas, cuando, de que maneras, y a su vez, estar listo para escuchar lo que necesita el otro, y aceptar que esto sea muy distinto de lo que vos necesitas.

También se puede acordar sobre que cuando sea el espacio de trabajo-ocio de uno, el otro pueda hacerse cargo de los chicos, las tareas, etc. Esto puede ayudar a crear límites saludables y expectativas claras.

Buscar significado juntos

Al final de un largo y estresante día, te podés ver tentado de tirarte en el sillón con el celular y desconectar del mundo. Pero, está bueno usar un par de minutos de momento de relax para conectar con la pareja sobre lo que les genera sentido.

Dejar de escuchar las noticias un rato, conectar con los planes, las expectativas, los anhelos sobre el final de esta cuarentena.

Para estos momentos puede servir rememorar buenos momentos juntos, repensar objetivos, comentarle al otro sobre un libro o película que haya llamado la atención.

También pueden elegir nutrir la relación al compartir algo como un curso online, clases, juntos o separados, para tener nuevos temas de conversación y de intercambio dentro de la monotonía del encierro.

Lara Kraiselburd. Psicóloga clínica.

Enfoque basado en evidencia. Psicología positiva.

Instagram: lara.kraiselburd