Tal como se esperaba tras el dato de inflación de enero, que se conoció hace dos días y que fue de 3,9%, finalmente, este jueves el BCRA dispuso una suba de casi 2 puntos de las tasas de rendimiento de los depósitos a plazo fijo y así, el nuevo piso se elevó a 41,5% anual para las colocaciones a 30 días, lo que representa un rendimiento de 50,4% de tasa efectiva anual (TEA), mientras que, para el resto de los depositantes del sistema financiero la tasa mínima garantizada se establece en 39,5%, lo que representa una TEA del 47,5%. 

Esta es la segunda suba de la tasa de interés en lo que va de 2022, luego del aumento que se dispuso del 6 de enero pasado. Cabe destacar que la primera semana de 2022 el Banco Central había comunicado una suba de la tasa mínima para los depósitos a plazo fijo tradicionales del 39% anual (TNA), mientras que la TEA era del 46,8%.

De este modo, el rendimiento de los plazos fijos para personas humanas se alínea con las expectativas de inflación anual y se vuelven más atractivo para los ahorristas apostar a ese tipo de inversiones, aunque aún falta para llegar a niveles realmente positivos. "

Así lo advierte el director de Analytica, Claudio Caprarulo, a iProfesional cuando señala que "el aumento es levemente mayor del que esperábamos, lo que es una buena señal, pero aún la tasa efectiva anual se encuentra por debajo de la inflación esperada para este año". Sin embargo, considera que es lógico que haya un camino gradual.

Esto se da en una jornada en la que el Banco Central (BCRA) salió neutro en el mercado de cambios y el día anterior había terminado la jornada con compras netas por US$ 5 millones. Así, lleva el acumulado positivo del mes a cerca de u$s100 millones, un número bastante pequeño, pero lo bueno es que lleva 12 rondas sin vender divisas. 

Según afirma la entidad en un comunicado, el nuevo nivel de la tasa de interés de política monetaria se adecua con los Objetivos y Planes del BCRA expresados en enero de 2020, en los que se fijó la meta de establecer un sendero de tasa de interés de política monetaria que favoreciera retornos reales positivos sobre las inversiones en moneda local. "Superada la crisis sanitarias, el BCRA ratificó en los Objetivos y Planes 2022 esa meta con el fin de preservar la estabilidad monetaria y cambiaria", informó la entidad.