A comienzos del mes de octubre, luego del sorteo de adjudicatarios de viviendas de Valle Chico, un grupo de personas se acercó a las oficinas del IPV en Esquel y durante varias horas ocuparon el lugar. En aquel momento, Marisa de Luca, delegada regional del organismo, tuvo un fuerte cruce con quienes estaban realizando el reclamo.

Luego de más de 24 horas, el grupo que estaba realizando la ocupación de las oficinas del IPV en Esquel, definieron retirarse. Cabe destacar que la noche anterior, De Luca realizó una denuncia en la Unidad Regional Esquel de Policía donde manifestó que 15 mujeres ingresaron por la fuerza y de forma coactiva le exigieron la entrega de 15 viviendas para ellas.

Posteriormente, la delegada Regional del IPV hizo la ampliación de la denuncia en la oficina del Ministerio Público Fiscal indicando que firmó un acta bajo presión de estas 15 familias que le exigían de forma coactiva la entrega de viviendas.

Consultada por la situación de las personas que realizaron la ocupación de estas oficinas, De Luca indicó que la cuestión va por los carriles de la justicia. "Es una investigación que ellos verán de qué manera se va desenvolviendo", expresó y señaló que aún no tiene novedades del caso.

Además remarcó que todavía no se le dio de baja del sistema del IPV a estas personas, "porque todavía la causa está en la justicia y hasta que no nos digan o determinen algo, nosotros no podemos tomar esa decisión".

"Esas familias participaron del sorteo, en un primer momento hicieron un planteo dentro de la ocupación, querían la adjudicación de 15 casas de forma directa, después fueron cambiando el planteo y querían explicaciones de los casos especiales", recordó De Luca.