El Gobierno Provincial está impulsando desde hace un tiempo el Proyecto de Riego de la Meseta Intermedia, que prevé irrigar 35.000 hectáreas ubicadas geográficamente entre las ciudades de Trelew y Puerto Madryn.

La propuesta se enmarca en un convenio dentro del  Programa Nacional Nuevas Áreas de Riego, y es un antiguo proyecto que ahora el Estado Nacional ha elegido como uno de los tres que se van a tomar como ejemplo para desarrollar asociaciones público-privadas, en las cuales el Estado y el capital privado invertirán de manera conjunta.

En este marco el gobierno provincial retomó el tema con fuerza en los último meses. EQSnotas dialogó con el Ingeniero Agrónomo de Esquel Teddy Lloyd, quien asegura que hay razones para, al menos, poner un manto de dudas sobre el proyecto para bombear 35 mil hectáreas con riego desde el río Chubut en la zona conocida como Meseta Intermedia.

En la siguiente entrevista se desgranan los detalles de lo que, según explica el Ingeniero, es endeble desde lo técnico, no cumple con las propias normas provinciales y podría afectar desde lo económico por ejemplo al Valle Medio. Según el propio Instituto Provincial del Agua en esa región podría desarrollarse un proyecto similar que generaría más trabajo que el que se propone desde el proyecto minero y mucho más atractivo desde lo económico.

Por último, Lloyd asegura que el proyecto podría afectar gravemente toda la cuenca  dado que en el cálculo de uso de agua que implicaría el riego de la Meseta Intermedia, superaría el mínimo necesario para mantener el caudal del Río Chubut en condiciones.

EQSnotas: ¿De qué se trata el proyecto de la Meseta Intermedia?

Es un proyecto que se gestó hace unos 30 o 35 años. Muy brevemente se trata de bombear agua desde el Río Chubut a la altura de Dolavon hacia un sector de la meseta que se halla entre Trelew y Madryn  ( a ambos lados de la Ruta 3 que une ambas localidades) para  poner bajo riego una superficie estimada  de unas 35.000 hectáreas.

Ubicación del proyecto
Meseta Intermedia: El proyecto que “hace agua por todos lados”

La obra implicaría la construcción de estaciones de bombeo, tuberías de impulsión, equipos hidromecánicos, reservorios, canales, tendido eléctrico, caminos y redes de agua potable a un costo estimado de alrededor de 246 millones de U$S lo que daría un promedio de 7.000 U$S por hectárea. El proyecto está pensado para los potenciales productores que rieguen por aspersión, lo que supondría  que deberían invertir aproximadamente 2.000 dólares por hectárea en la adquisición de los equipos necesarios y además abonar un  costo operativo común de 200 dólares por ha (siempre y cuando estén bajo riego las 35.000 has) más los costos propios de cada predio (que dependen del cultivo de qué se trate ya que tienen diferentes demanda de riego) que podrían estimarse en alrededor de 1,5 dólares por mm de riego ( esto lógicamente depende de la tarifa de energía que se aplique).

Esquema de la obra
Meseta Intermedia: El proyecto que “hace agua por todos lados”
¿Por qué se cuestiona al proyecto desde varios ámbitos?

Genera muchas dudas por varias razones, desde las que se pueden definir como eminentemente técnicas, económicas (costo muy elevado de construcción y mantenimiento)  aquellas que pueden describirse como ambientales  y otras de carácter estratégico que tienen que ver con el desarrollo económico de las diferentes regiones de la provincia.

¿Cuáles son los reparos que se presentan desde lo técnico?

La provincia del Chubut tiene un Plan Director de Manejo del Río Chubut, bastante detallado,  donde menciona todas las obras potenciales que se podría o debería hacer sobre este río para mejorar su uso y aprovechamiento y las prioriza en base a criterios de urgencia  de aplicación.

En  esta priorización los estudios como el de la obras de regulación del Valle Alto del Río Chubut, es decir Maitén, Fofo Cahuel,  Lepá, Gualjaina, etc,  aparecen como de alta prioridad y la Meseta Intermedia como de prioridad media. Cabe aclarar que las obras de regulación del VARCH  representa inversiones mucho menores y de costos operativos más bajos que los de la Meseta Intermedia, a la vez  que beneficiará a productores ya instalados y trabajando en esas zonas.

Otro punto no menor es que el mismo Plan Director establece que la superficie posible de ser regada en este proyecto asciende a las 11.000 hectáreas. Es llamativo que se haya sido cuestionado este aspecto del proyecto en un taller del Comité de Cuenca del Río Chubut en agosto del año pasado y que no haya trascendido al público. Cabría preguntarse cómo pasó de ser de prioridad mediana al primer puesto entre las obras a realizarse en este río y cómo creció de 11.000 has a 35.000.

También debe destacarse que no se ha realizado una presentación formal del proyecto ni la audiencia de impacto ambiental (requerida por ley). A pesar de que el presidente del IPA  anunció en una conferencia de prensa de principios de agosto de este año, la finalización de un trabajo de dos años y medio donde habrían participado técnicos de "todo el mundo" y que se estaba en trámites de contratación de "una empresa local "  para la realización del estudio de impacto ambiental no hay disponible para el público  (por lo menos yo no lo pude encontrar) más documentos que unas 44 páginas llamadas documento de ingeniería con los membretes de la Secretaría de Infraestructura Hídrica la FAO y del Grupo Banco Mundial donde se describen  (muy brevemente) las características técnicas del proyecto. Sin embargo no se brindan los fundamentos en los que se basa la selección de esa obra sobre otras que, como mencioné anteriormente, aparecen como  más prioritarias en el propio plan director del IPA. Es de esperar que, en algún lado, haya un proyecto bien hecho y con todos los antecedentes que respalden con seriedad semejante decisión, que de todas maneras debe ser sometido a un debate más amplio.

En la misma conferencia de prensa el responsable del IPA expresa su convicción de que el estudio de impacto ambiental esté listo en seis meses  (esto lo decía en agosto) para lanzar la licitación en enero o febrero. De todas  maneras, la ley establece taxativamente que en la evaluación del impacto ambiental se debe  dar participación a  todas las corporaciones municipales  que sean afectadas por el proyecto y  que se debe realizar una audiencia pública que debe convocarse con un mínimo de 30 días de anticipación, por lo que se vislumbra que muy difícilmente pueda lograrse tratar el tema con la premura que quiere instalar el gobierno. Cabe destacar que el municipio de Rawson ya ha manifestado sus reparos para con el proyecto y un concejal manifestó la determinación de presentar un amparo judicial si se sigue adelante con la idea de licitarlo.

Otro tema que genera dudas es que un estudio realizado en esa zona hace ya varios años, establece que los suelos aptos para la agricultura son de una superficie mucho menor a la asignada para el proyecto.

Otra cuestión no menor que se menciona, es que la cantidad de agua que se extraería del río, significaría la caída del caudal por debajo del establecido como ecológico por el mismo Plan Director ya mencionado a la vez que debería estudiarse el efecto potencial sobre la operatividad del puerto de Rawson que podría ver afectado el acceso a causa de la disminución de la profundidad de la boca del río.

Meseta Intermedia: El proyecto que “hace agua por todos lados”
¿Cuáles son los cuestionamientos que tienen que ver con lo estratégico?

Si se decide desarrollar la Meseta Intermedia, comprometería casi todo el caudal de agua disponible para el desarrollo de áreas bajo riego en la cuenca del Chubut, en detrimento de las otras áreas con posibilidades de riego (8.000 has en el Valle Alto y unas 12,000 en el valle medio, a mucho menor costo como ya mencioné). Esto además de inclinar el péndulo del desarrollo hacia la costa (que ya cuenta con otros recursos como la pesca, el turismo y las 20.000 has que ya están bajo riego en el Valle Inferior) priva a otras zonas como el Valle Medio de una alternativa productiva de gran impacto social que generaría muchos más puestos de trabajo que la minería que se presenta como la única posibilidad de desarrollo de esa zona.

¿Qué otros aspectos pueden mencionarse?

Este es un proyecto que paradójicamente "hace agua" por todos lados, desde la comunicación del mismo ¿Cómo es posible que no se cuente con información disponible para el público? En la página del IPA no pude encontrar ninguna mención a este proyecto mucho menos un documento: hasta la base técnica que aparece por lo menos cuestionable, pasando por aspectos que tienen que ver con políticas de  desarrollo. Hay otros puntos que tienen que ver con el contexto general. Por ejemplo ¿Por qué suponemos que la Meseta Intermedia va a funcionar si el VIRCH funciona a duras penas con la compañía de riego que tiene deudas muy importantes  y con una morosidad de casi el 40 % de parte de los productores en el pago del canon de riego?¿ Qué pasaría si los regantes de la Meseta intermedia tuvieran el mismo nivel de morosidad? También vemos que el IDEVI (Valle inferior del Rio Negro) con una superficie superior todavía no terminó de despegar como zona productora y todos los días nos llegan noticias de la crisis del sector frutícola en el Alto Valle del rio Negro. ¿No sería mucho más prudente desarrollar otras áreas a menores costos  como las del Valle medio y Valle alto?