En la madrugada del 25 de enero José Luis Cabezas se retiró de la fiesta de cumpleaños del empresario Andreani en Pinamar, quien siempre invitaba a los equipos de prensa que cubrían la temporada de verano.

Ese fue su final. Fue golpeado, secuestrado y asesinado de dos tiros en la cabeza por el policía Gustavo Prellezo, integrante de la banda de Los Horneros, por orden del poderoso empresario Alfredo Yabrán.

Cabezas cometió el error de fotografiar la cara de Yabrán, un empresario desconocido pero sindicado durante el gobierno de Menem como el Jefe de una mafia por el Ministro Cavallo. 

A partir de ese hecho fue víctima de una serie de atentados menores que jamás imaginó, y lo llevaron a su desenlace fatal.

Se cumplen 26 años del asesinato de José Luis Cabezas

Cabezas es homenajeado año a año por la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (ARGRA), especialmente, y la organización "los ojos hablan" que lo recuerda junto al monolito erigido en su nombre en la localidad de Pinamar, pero también acompañan en todo el país miembros de prensa y vecinos comprometidos con su causa, la más resonante para los argentinos sobre el ataque a la libertad de expresión.

En Esquel también tiene una significación especial su memoria, los trabajadores de medios se unieron para la construcción del monumento ubicado frente al edificio de tribunales con los ojos de José Luis.

Monumento a José Luis Cabezas en Esquel
Monumento a José Luis Cabezas en Esquel

Fuente: Infobae