Por Paula Moreno

La mamá de Lorenzo Rossi, Rocío Esteban se niega al odio. Así lo manifestó en cada audiencia donde estuvo frente a la persona que atropelló y mató a su hijo de 10 años en diciembre del año pasado.

No podía creer cuando escuchaba la definición del Juez Zachino explicando que aquel joven, hoy un adulto imputable no iba a tener pena alguna por el hecho por el que fue declarado responsable penalmente.

La indignación es inmensa, y Rocío dice una y otra vez que no quiere  llorar más. A pesar de todo se mezcla cada tanto una sonrisa con los ojos húmedos y luminosos, casi acostumbrados a esta realidad.

Sin embargo sigue creyendo que hay una justicia divina y que Lorenzo está cerca siguiendo desde algún lugar todo el calvario que comenzó hace casi un año. De alguna manera siente el abrazo de su hijo.

Sigue ideando alternativas para visibilizar estas situaciones mientras ruega que nadie más pase por lo que hoy le toca.

Abroquelada a su familia, espalda con espalda se acercaron este jueves al Concejo Deliberante para escuchar la sanción que tuvo la ordenanza que habilita la colocación de estrellas amarillas en cada lugar donde un accidente vial cobre una nueva víctima. Y en ese espacio también se escuchó el repudio a la definición que este jueves 29 de noviembre dio a conocer el Juez Zachino. El autor, el responsable de la muerte de Lorenzo no tendrá pena alguna.

No hay razón para la sin razón.

El testimonio de Rocío dice el resto

#EnVideoEQS