Esta mañana, por primera vez en la historia educativa los directores de escuelas secundarias entregaron las llaves de los establecimientos a Supervisión de Escuelas debido a la profunda crisis que se vive a nivel provincial.

Corina Milan, de la Escuela 7722 expresó que "no podemos trabajar en este marco de ilegalidad y violencia" y marcó "la angustia de no saber cómo sigue todo esto. En todo caso hay que preguntarle a nuestros superiores. Esto pasa porque estamos en un estado de decepción crítico. Tenemos que cambiar el rumbo".

Por su parte, Oscar Lenarduzzi, de la escuela 735 comentó que un punto de quiebre fue la definición del gobierno de desoír o pasar por alto las vías administrativas por las que los directivos informan las asistencias de los docentes. "No respetaron las vías administrativas formales y esto generó un malestar generalizado".