En el marco de lo que desde el gobierno nacional impulsan como ordenamiento del Estado, la Superintendencia de Servicios de Salud daría de baja diez obras sociales, entre las que se encuentra la de la Universidad Nacional San Juan Bosco. Lo harían mediante resolución administrativa que será publicada esta semana en Boletín Oficial.

De esas diez instituciones que dejarían de estar en el Registro Nacional de Obras Sociales (RENOS), cuatro corresponden a las Universidades, una es sindical, la de Trabajadores de Prensa del Chaco; la otra es de Papel Misionero, y otra de ADOS (Asociación de Obras Sociales de Mar de Plata, según publicó el diario Clarín.

Para discontinuarlas, la razón que brindó la SSS es que eran económica y operativamente inviables; o bien que ya estaban en quiebra o que venían pidiendo el cese de actividades.

Cabe destacar que estas instituciones no generaban una erogación de dinero público para sostenerlas pero sí implicaba gastos administrativos que discurren por el seguimiento que pueda hacerles la SSS. En algunos casos hay afiliados que siguen recibiendo prestaciones de esas instituciones pero fuentes vinculadas a la SSS indicaron que serán reasignados a otras obras sociales.

El próximo paso desde la SSS sería confederar las obras sociales: esto es que si un mismo sector, supongamos una industria, tiene varios gremios afines y cada uno con su obra social, la idea a futuro es que una sola institución de salud atienda a los afiliados de cada uno de esos sindicatos.

Hoy coexisten unas 300 obras sociales que asisten a unas 25 millones de personas. El resto de la ciudadanía lo hace mediante prepagas o en los hospitales públicos.

También y en el mismo sentido de control es que la SSS está realizando junto con la AFIP auditorías en las obras sociales sindicales: ponen el ojo en los balances y en los manejos financieros de las entidades.

Fuente Clarín