El informe elaborado por la Municipalidad de Esquel marca que, si no hubiera restricciones por COVID-19 en este momento, el déficit de funcionamiento sería de aproximadamente $1.200.000 mensuales, unos $14.000.000 anuales y remarca que en nuestra ciudad, a diferencia de otros natatorios, los costos de gas y energía eléctrica son solventados por la municipalidad.

Asimismo, en cuanto a las inversiones necesarias para poner en marcha nuevamente el natatorio en buenas condiciones, el estudio indica que se debe cambiar las dos calderas antiguas por tres calderas más compactas y un nuevo sistema de cloración salina con un costo aproximado de $2.700.000, con lo que el costo total estimado de la inversión sería de $3.500.000.

Otra alternativa que se analiza es la utilización del Natatorio del Centro de Encuentro, ubicado en Barrio Badén, que posee amplios vestuarios, sala de máquinas con equipos modernos y gradas para público.

Para poner en marcha el edificio sería necesario la construcción de la playa de estacionamiento, cercado perimetral, el reemplazo de los vidrios vandalizados y la puesta a punto de todas las instalaciones. Su costo estimado es de $.1.600.000. y el total estimado de la puesta en marcha de la pileta del Centro de Encuentro es de $.2.200.000.

Además se analiza el funcionamiento de la Pileta bajo protocolo COVID-19 por el cual solo podrán hacer uso de la misma unas 300 personas por mes. La recaudación sería 4,5 veces menor de la normal y el déficit estimado alcanzaría a $.5.500.000 por mes.

Según el informe, con estos valores no sería posible realizar el mantenimiento mínimo de la pileta, vestuarios y dependencias.

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